José Luis Antúnez, presidente de Nucleoeléctrica Argentina S.A., abordó el papel crucial de la energía nuclear en la transición energética durante un reciente análisis. Antúnez destacó la necesidad de esta fuente de energía para avanzar hacia un futuro más sostenible y mencionó el estado actual de la central Atucha II.
La energía nuclear representa aproximadamente el 7% del consumo energético en Argentina. Es fundamental para la transición energética, ya que no emite dióxido de carbono, lo que la convierte en un elemento clave para la descarbonización de la matriz energética mundial, señaló Antúnez. Este tipo de energía es esencial para reducir la huella de carbono y contribuir a los objetivos climáticos globales.
Proyectos Futuros en Generación Nuclear
Antúnez también compartió su visión sobre el futuro de la energía nuclear en el país. Nuestra aspiración es aumentar la participación de la energía nuclear al 10% de la matriz energética nacional, afirmó. Esto incluye la finalización de dos nuevas centrales en proyección, además de la central Atucha 3. Se prevé la construcción de una central gemela de Embalse, que utilizará uranio natural y agua pesada. Actualmente, la media mundial de energía nuclear en la matriz energética se sitúa en torno al 11%, lo que resalta el potencial de crecimiento en Argentina.
Desafíos y Reparaciones en Atucha II
Respecto a la central Atucha II, Antúnez mencionó un desperfecto mecánico que ha detenido su producción. Este desperfecto se encuentra en el fondo del reactor, lo que complica el acceso para su reparación. La solución más sencilla implicaría desarmar el reactor, un proceso que podría tardar entre dos y tres años. Sin embargo, estamos optando por una reparación remota a través de los canales del combustible. Esperamos que la central esté operativa nuevamente entre julio y agosto, explicó.
El papel de la energía nuclear en la transición energética es crucial no solo para Argentina, sino también en el contexto global. Con una mayor inversión en infraestructura y tecnología, el país puede consolidar su posición como un actor clave en la producción de energía limpia y contribuir a un futuro más sostenible.
